Saltar al contenido

Si viajas con niños ¡recuerda!

El buen tiempo y las mini-vacaciones de semana santa ya están aquí. Durante estos días, muchos de nosotros viajaremos, algunos con niños.

El jefe de Pediatría, Jordi Sapena, nos ha dado estos consejos para que los viajes en familia sean tranquilos y, sobre todo, seguros.

Niño en el avión mirando por la ventanillaNiño en el avión mirando por la ventanilla

Imagen de Steven Coffey Unsplash


En coche

  • Utiliza siempre los sistemas de retención infantil homologados y adecuados al peso del niño. No te olvides nunca de abrocharles el cinturón de seguridad, el tuyo también.
  • Activa el dispositivo de seguridad en las puertas y ventanillas traseras, evitarás que se abran de manera accidental.
  • Lleva siempre agua en el coche, bolsas para el vómito, toallitas húmedas y ropa de recambio.
  • Haz paradas de forma regular.
  • Procura que los niños estén bien sujetos con sistemas de seguridad. Distráelos con música, vídeos y canciones y evita la lectura. Así evitarás los mareos.
  • Consultar con tu pediatra para que te asesore en la utilización de medicamentos anti-mareo, si fuera necesario.
  • En los bebés el llanto desconsolado puede ser el único síntoma de mareo, tenlo en cuenta.

En avión

  • Controla a los niños permanentemente en las terminales aéreas, más si hay aglomeraciones. Sigue siendo útil, en caso de tener que ir con varios niños, que éstos lleven colgada una tarjeta de identificación con su nombre y un teléfono de contacto (Actualmente también existen pulseras de identificación para niños con un código bidi para leer los datos del mismo).
  • La temperatura de la cabina del avión puede ser baja debido al aire acondicionado, lleva ropa de abrigo ligera, sobre todo si viajas con bebés.
  • Llevar siempre agua, bolsas para el vómito y toallitas húmedas.
  • Si el viaje es largo, lleva cuentos, juegos de mesa, lápices de colores y papel o cualquier otro juego para que se distraigan.
  • Las diferencias de presión que se producen durante el despegue y sobre todo durante el aterrizaje pueden afectar a los oídos de los niños y hacer que se "tapen", con las consecuentes molestias e incluso con la aparición de dolor y otitis secundaria. Para evitarlo da al niño algún líquido para beber y que degluta durante estas maniobras (zumo, agua, infusiones o leche). Dar el pecho al bebé es un buen método. Si el niño es mayor, un "chupa chup", un chicle o similar pueden ser un buen aliado.

En barco

  • Con niños pequeños y si es posible, es aconsejable viajar de noche y acondicionados en camarote.
  • Evita que deambulen solos por el barco.
  • Lleva siempre agua, el ambiente marino aumentará su sed.
  • Consultar con el Pediatra sobre la utilización de medicamentos anti-mareo.

Teknon-banner-blog-01. Este enlace se abrirá en una ventana nuevaTeknon-banner-blog-01Este enlace se abrirá en una ventana nueva

Insertar comentario

Pide cita sin compromiso

Recibe puntualmente en tu correo, noticias y recomendaciones de salud, para ti y los tuyos.