Infecciones urinarias

Infecciones urinarias de repetición

Las infecciones urinarias de repetición son un problema habitual que resulta molesto. Son más frecuentes en mujeres sexualmente activas. Los síntomas típicos son: aumento de frecuencia para ir a orinar, dolor durante la micción y a veces sangre con la orina (hematuria). A pesar de estos síntomas, es recomendable realizar un cultivo de orina antes de empezar la medicación. Los pacientes que se automedican desarrollan resistencias y sus infecciones son más difíciles de tratar.

El urólogo tratará de encontrar las causas que hacen más frecuentes dichas infecciones. Buscaremos causas como las piedras en el riñón o vejiga (con una ecografía) y problemas del funcionamiento de la vejiga (con una flujometría o estudio urodinámico). En algunos casos, la vejiga no vacía bien porque la persona va a orinar muy pocas veces (una o dos en todo el día).

Infecciones en mujeres

Deben estudiarse las infecciones cuando una mujer sexualmente activa tiene más de una infección al año. El hábito miccional y las relaciones sexuales pueden contribuir a que se repitan las infecciones.

Infecciones en varones

Una de las causas más frecuentes de las infecciones urinarias en varones adultos es un problema en el vaciado de la vejiga. Si hay una obstrucción que dificulta el vaciado (bien por problemas de próstata o de uretra), la vejiga tiene que hacer más presión y puede quedar orina tras la micción (residuo post-miccional). Esa es una situación de riesgo para tener infecciones que suelen presentarse como prostatitis (con mucha fiebre) o afectar al testículo (orqui-epididimitis).

Requieren un tratamiento prolongado (3-4 semanas) y a veces el ingreso del paciente. Si tras el tratamiento el estudio urológico confirma que hay obstrucción, suele ser necesaria una intervención desobstructiva de próstata o de uretra.

Infecciones en niños

Hay que descartar el reflujo de orina a los riñones y los problemas de funcionamiento de la vejiga.

Tratamiento

En caso de que existan factores asociados, trataremos los factores asociados (piedras, mal funcionamiento de la vejiga), realizando un tratamiento destinado a los mismos. Sin embargo, esta situación cada vez es más rara. En la mayoría de casos se puede realizar un tratamiento "supresivo" con bajas dosis de antibiótico. Se ha demostrado que el arándano rojo americano (cranberry), en cápsulas, puede disminuir la frecuencia de las infecciones. Este es un tratamiento de elección.

Autovacunas

En los últimos años se ha aprobado el tratamiento de las infecciones con autovacunas. Son unas vacunas preparadas para las bacterias que causan las infecciones. Después de varios años de experiencia, los resultados en nuestros pacientes son muy positivos. Hay distintos tipos de vacunas dependiendo de la severidad y tipos de infecciones.

Normas higiénicas básicas

Es mejor ir a orinar a menudo (al menos cinco veces al día). Si retrasamos la micción, la vejiga tiene más dificultad para vaciarse: el residuo que queda en la vejiga tras la micción puede favorecer las infecciones.

Higiene íntima en las mujeres: la zona vaginal siempre se debe limpiar de adelante hacia atrás. Es conveniente orinar después de las relaciones sexuales.

Tópicos sobre las infecciones urinarias

Las infecciones urinarias NO se adequieren en las piscina ni en los lavabos públicos.