Laserterapia

El láser es un aparato que produce unas ondas de luz capaces de penetrar en nuestro organismo y producir efectos. Hay distintos tipos de láseres en función de los efectos buscados.

Existe una clasificación mundial para la potencia de los láseres, la cual es considerada inofensiva de 1 a 3mW. De 4 a 7 mW son láseres de uso médico o terapéutico porque la luz tiene ya carácter invasivo y puede afectar tanto al tejido cutáneo en el que puede producir abrasiones (muchas veces provocadas por la Medicina para buscar efectos rejuvenecedores de la piel), como en el subcutáneo en el que actúa por su acción fotobiológica. Y con más de 7mW, los láseres son exclusivamente de uso industrial o militar.

Hay láseres de muy baja potencia que pueden ser utilizados por esteticistas porque no tiene capacidad de producir efectos nefastos en el organismo y otros de mayor potencia que son utilizados en el quirófano. Y, finalmente, los hay de muy alta potencia que son utilizados exclusivamente en el medio industrial o en el militar.

Entre los láseres médicos más utilizados, cuya potencia se sitúa entre 4 y 7 mW está los de alejandrita, el de rubí, el de CO2, el de helio-neón, el de argón, el infrarrojo, el de neodimio-yag o últimamente el de Holmium yag o el lasik.

Los láseres terapéuticos actúan a través de la fototerapia. Es decir, utilizan la luz coherente del láser que actúa como antiinflamatorio, antiálgico (contra el dolor) o para la regeneración de tejidos. Tienen la categoría de terapéuticos: el de helio.neón, el de infrarrojo y el de Epi-Ligth; siendo quirúrgicos los de rubí, argón, CO2 y el de neodimio yag o el de holmium yag y el lasik.

En Patología Vascular, el Láser es utilizado en el tratamiento de varices y en patologías de las arterias craneales: cefaleas vasculares, jaquecas o migrañas.

En casos de hemiplejias que cursan con hipertonias se consigue mayor rapidez de relajación muscular combinando técnicas de laserpuntura con reflexoterapia y masoterapia.