Láser de diodo

El láser de diodo también se denomina "láser rojo". Este láser requiere una energía máxima de 120 W y su principal ventaja es que tiene la tasa de vaporización más alta, llegando a destruir 7 gramos en 10 minutos, así como una coagulación más potente que los otros modelos de láser. Se pueden tratar próstatas de hasta 80 gramos de peso y el procedimiento puede ser monitorizado mediante control ecográfico. A las 24 horas de la operación se retira la sonda vesical y el paciente recibe el alta.