Cirugía de la epilepsia

La epilepsia se controla adecuadamente con medicación en el 80% de los pacientes. Sin embargo, el 20% restante sufre no solamente las consecuencias de persistir las crisis con el consiguiente peligro de lesionarse y merma de su salud, sino que el proceso ocasiona, principalmente en niños, un deterioro funcional cerebral de mayor o menor cuantía por las crisis repetidas. Además, en ocasiones padecen los efectos indeseables de los antiepilépticos en los niños, principalmente a nivel cognitivo, así como el aislamiento social y la baja autoestima que habitualmente conlleva la enfermedad no controlada.

El paciente resistente a la medicación debe ser referido precozmente, en máximo 2 años desde el inicio de la enfermedad, para evaluación con monitorización vídeo-EEG y así poder considerar si la cirugía puede ser una opción para él.