Prótesis de cadera de superficie

Hip Resurfacing

Una prótesis de cadera es una pieza que sustituye a la articulación dañada cuando esta es dolorosa, está deformada y limita la movilidad de la persona. Las prótesis convencionales se desgastan con los años y su recambio es técnicamente difícil, por este motivo, se recomendaba colocar las prótesis en pacientes ya mayores, para que no fuera necesaria una segunda intervención. En los últimos años la evolución de los materiales y los diseños ha dado como fruto prótesis más duraderas y que permiten al paciente volver a practicar deporte de alto nivel y actividades físicas exigentes. El desgaste de estas prótesis es muy reducido, por lo que su expectativa de vida es muy elevada aunque el paciente mantenga una gran actividad física.

Las prótesis de cadera de superficie. Con este tipo de implantes y una cirugía precisa no sólo se ha conseguido reducir el riesgo de luxación, sino que la conservación del hueso de la cabeza y cuello femoral permiten que, si en el futuro fuera necesario un recambio, hacerlo por un vástago convencional primario sobre hueso íntegro. Estas prótesis son adecuadas para pacientes con artrosis primaria, artrosis postraumática (fractura), necrosis avascular, casos de displasia y luxación congénita de cadera, y otras patologías de la cadera como la enfermedad de Perthes, siempre que exista suficiente hueso en la cabeza y cuello femorales y que su alineación sea correcta. Están indicadas en pacientes que no pueden o no quieren dejar una actividad física intensa, ya sea laboral, recreativa o deportiva, tras implantarse una prótesis de cadera. Y en pacientes en que, por su esperanza de vida y nivel de actividad física, si se implanta una prótesis de cadera convencional, puede existir una alta probabilidad de requerir un recambio de dicha prótesis en el futuro.