Biopsia testicular

Esta técnica permite obtener una muestra de tejido testicular. Puede tener una finalidad diagnóstica o terapéutica.

¿Qué es la biopsia testicular?

La biopsia testicular es una técnica quirúrgica que consiste en la obtención de una muestra de tejido testicular a través de una incisión en el escroto. El estudio previo del varón (exploración física y analítica hormonal) ayuda a establecer en qué casos sería útil realizar una biopsia testicular, aunque solamente el estudio al microscopio del tejido obtenido tras la biopsia permitirá realizar un diagnóstico ajustado.

La utilidad de la biopsia testicular puede ser diagnóstica (toma de una muestra de pulpa testicular para estudio de anatomía patológica (valorar la función testicular y conocer si el tejido testicular produce espermatozoides o no), muestra para estudio genético de meiosis (valorar si se producen espermatozoides con > o < de 23 cromosomas, que es lo que deben llevar en condiciones normales). Aunque en la mayoría de las ocasiones se programa la biopsia con finalidad diagnóstica, también puede realizarse por razones terapéuticas: extraer espermatozoides inmaduros, si los hubiere, para su uso en reproducción asistida y congelación de muestra de reserva para posteriores ciclos de reproducción.

¿Cómo se realiza esta prueba?

La biopsia testicular es una intervención ambulatoria en la que el paciente entra y sale por su propio pie, sin requerir ingreso hospitalario. La anestesia (local) se realiza a nivel inguinal.

Durante la biopsia, el andrólogo obtiene uno o varios fragmentos de uno o de los dos testículos del varón para ser estudiados en el laboratorio con el fin de determinar si contienen espermatozoides o no.

El estudio que se lleva a cabo en el laboratorio comienza dislacerando los fragmentos para así liberar los espermatozoides, si los hubiere, y prepararlos para la técnica de ICSI (inyección intracitoplasmática de espermatozoides) seleccionando un espermatozoide por cada ovocito en el mismo día y/o para criopreservarlos y conservarlos.

Aunque es posible conseguir embriones y embarazos a partir de ICSI con espermatozoides obtenidos de biopsia testicular, las tasas de fecundación son menores que cuando se utilizan espermatozoides procedentes de eyaculado, debido a que los primeros son inmaduros.

¿En qué pacientes está indicada la intervención?

La biopsia testicular está indicada en cuatro situaciones:

  • En la criptorquidia (descenso incompleto de uno o ambos testículos a través del canal inguinal hacia el escroto).
  • En las azoospermias, aquellas situaciones en las que no se encuentran espermatozoides en el eyaculado. En estos casos el pronóstico va a depender de si realmente no se producen espermatozoides -azoospermia secretora- o de si estos sí que se producen pero no aparecen en el eyaculado -azoospermia secretora u obstructiva-.
  • En la aspermia o falta de eyaculación, cuando no es posible conseguir una muestra del semen eyaculado mediante otras técnicas como el masaje prostático, la electroestimulación prostática o el lavado de orina en los casos de eyaculación retrógrada.
  • En aquellos varones en los que, teniendo una vasectomía previa, esta no sea reversible o no puedan obtenerse espermatozoides mediante microaspiración epididimal.

¿Cuánto dura el procedimiento? ¿Es una prueba dolorosa?

Como toda intervención ambulatoria con anestesia local, suele ser una actuación médica de corta duración (unos 30 minutos) y de rápida recuperación. El dolor local, que remite con analgésicos, la inflamación y/o el hematoma son las principales complicaciones que pueden presentarse, aunque no son habituales. Se recomienda una revisión a la semana de la intervención.

¿Qué alternativas a esta técnica existen?

La alternativa, cuando no se detectan espermatozoides en la muestra testicular biopsiada, es el uso de semen de donante anónimo.