Terapia fotodinámica

La terapia fotodinámica (TFD) es un tratamiento introducido recientemente para tratar lesiones precancerosas superficiales de la piel: las queratosis actínicas o solares, los carcinomas basocelulares superficiales o los carcinomas espinocelulares in situ o enfermedad de Bowen (Cáncer de piel).

Las indicaciones principales de la terapia fotodinámica son las lesiones múltiples en zonas extensas o como prevención para grandes áreas de posible cancerificación. Los resultados cosméticos son superiores a las terapias destructivas convencionales, lo que la posibilita como una buena opción en los casos adecuados localizados en áreas estéticas.

La función desarrollada por la terapia fotodinámica se puede considerar de tipo combinado físico-químico. Se basa en la activación de una sustancia fotosensibilizante mediante una fuente de luz visible que produce oxígeno activado citotóxico en las células cancerosas provocando su destrucción. Se trata, pues, de una destrucción rigurosamente selectiva.

La sustancia química empleada es un derivado del ácido levulínico: el ácido aminolevulínico (ALA) o el aminolevulinato de metilo (MAL). Su acción es la inducción de la acumulación de porfirinas en el núcleo celular. Las células "alteradas" (precancerosas o cancerosas) permiten mayor penetración que las células sanas de alrededor, por lo que se puede repetir las veces necesarias sin riesgo alguno.