Pruebas cardiológicas

Ecocardiograma

Es una técnica que permite la visualización del corazón en tiempo real mediante la emisión de ultrasonidos. Con ella se estudia la anatomía y la función del corazón. Es totalmente inocua y no causa ninguna molestia.

Prueba de esfuerzo

Es un registro de la respuesta del corazón al ejercicio. Para ello el paciente camina en una cinta rodante y se registra simultáneamente un electrocardiograma. Es una prueba segura y con un índice de complicaciones muy bajo, siempre y cuando esté indicada por un médico que conozca las contraindicaciones de esta.

Electrocardiograma ambulatorio (Holter)

Consiste en registrar la actividad eléctrica del corazón durante 24 horas. Se colocan unos electrodos en la piel (para registrar un electrocardiograma) que se llevarán durante 24 horas junto con una grabadora (tamaño walkman). De esta manera se pueden detectar aquellas alteraciones del ritmo cardíaco que ocurren de forma intermitente.

Holter de presión

Consiste en llevar un pequeño ordenador portátil junto con un manguito de presión en el brazo y unos electrodos pegados a la piel, para registrar la presión arterial y el electrocardiograma durante 24 horas. Se utiliza para el estudio de la hipertensión arterial y monitorización de la respuesta al tratamiento.

Resonancia magnética

Es una técnica de imagen, no invasiva y que no produce irradiación, que permite la visualización de las estructuras cardíacas y su funcionalismo con gran detalle, sin necesidad de recurrir a los Rayos X ni a radiaciones. Se utiliza para determinar con gran exactitud la extensión de un infarto y la función cardíaca, y en el estudio de determinadas patologías.

Coronariografía no invasiva por DMD (TC)

Es una técnica de imagen que utiliza un nuevo y sofisticado escáner que permite la visualización de la anatomía de las arterias coronarias de forma no invasiva. Se requiere tan sólo una pequeña punción en una vena del antebrazo para inyectar contraste yodado. La exploración es segura y de corta duración ya que en aproximadamente 30 segundos se completa el estudio.

Coronariografía y cardiología invasiva

La coronariografía es la única técnica que permite definir con precisión el número y severidad de las obstrucciones coronarias , lo que es imprescindible para elegir el tratamiento adecuado, que a menudo puede realizarse durante el mismo procedimiento. Consiste en introducir un catéter (tubo fino) por la arteria femoral (en la ingle) hasta el corazón, a través del cual se inyecta un contraste radiopaco para visualizar las arterias coronarias a Rayos X. El procedimiento se realiza con anestesia local sobre la zona inguinal para evitar el dolor de la punción arterial. La manipulación del catéter no produce molestias y generalmente el paciente no nota nada.

Si se puede reparar la lesión en el mismo procedimiento, se introduce un catéter con un balón en la punta que se infla y desobstruye la arteria (angioplastia). En ocasiones se colocará en dicho lugar una malla metálica circular para mantener la arteria abierta (stent). El éxito de estas técnicas de intervención sobre las arterias coronarias explica que hoy se utilicen con tanta o más frecuencia que la cirugía coronaria.

El cateterismo tiene un riesgo muy bajo de complicaciones, siendo la más frecuente la aparición de un hematoma en la zona de punción. Sin embargo, existe un mínimo riesgo de complicaciones más importantes y es por ello que esta prueba sólo debe realizarse cuando el especialista lo considere indicado.