¿Qué beneficios aporta esta técnica?

Una cirugía por artroscopia es menos agresiva y menos invasiva que la cirugía abierta tradicional. Se realiza mediante dos pequeñas incisiones, por lo que la cicatriz de la lesión es menor y el tiempo de recuperación disminuye. Asimismo, la artroscopia se realiza con anestesia local-regional , de manera que la estancia hospitalaria es menor.

Esta técnica, además, permite al cirujano tener una mejor visualización de la lesión y le permite realizar un trabajo más preciso.