Lesiones de los tendones

El manguito de rotadores está formado por cuatro tendones que envuelven la cabeza del húmero (supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular). Según el tipo de lesión y el lugar de la articulación en el que se encuentra, podemos hablar de distintos tipos de lesiones:

  • Tendinitis: se trata de la inflamación de un tendón que puede producirse por la repetición de un mismo movimiento o postura. Los tipos de tendinitis más comunes, según el tendón en el que se producen, son:
    • Tendinitis del supraespinoso: a causa de repetidos movimientos de elevación del hombro, se produce un pinzamiento entre la cabeza del húmero y el arco acromial. Es el motivo principal del síndrome subacromial u hombro doloroso que suele acabar en la rotura del tendón.
    • Tendinitis cálcica: inflamación de los tendones del maguito de los rotadores y en especial del tendón del supraespinoso a causa del depósito de material cálcico en su interior.
    • Tendinitis por inestabilidad del hombro: unos ligamentos alargados que no sujetan bien la articulación y que causan una leve inestabilidad del hombro entre la cabeza humeral y el omoplato pueden ocasionar una tendinitis con dolor persistente en el hombro.

Ante una tendinitis, el tratamiento habitual pasa por reposo y rehabilitación. Si el tratamiento conservador no funciona, puede ser necesario realizar una artroscopia de hombro. Tras la cirugía, el paciente deberá realizar un tratamiento de fisioterapia.

  • Roturas tendinosas: una rotura de tendones puede producirse por la degradación de una tendinitis. Las roturas, en caso de ser parciales, permiten cierto movimiento de la articulación pero con dolor, algún crujido y disminución de la fuerza. Sin embargo, si se trata de una rotura total, el paciente presentará dolor e incapacidad para levantar el brazo o puede levantarlo con dolor. En estos casos, el tratamiento habitual es la cirugía para reparar el daño.