Enfermedad arterial periférica

El tratamiento de la insuficiencia arterial periférica es en gran parte un problema quirúrgico y, si es bastante grave, a menudo acaba con una amputación. Las medidas conservadoras, tienen un valor limitado.

Deben probarse los medicamentos vasodilatadores, aunque con frecuencia la contracción se debe a cambios orgánicos en la pared del vaso y por lo tanto los vasodilatadores son ineficaces.