Amígdalas y adenoides (vegetaciones)

¿Qué son las amígdalas?

Las amígdalas, que están situadas a ambos lados del fondo de la garganta, son unas glándulas de tejido linfoide, que reaccionan delante de las infecciones. Algunas veces, las infecciones frecuentes que se dan en los niños, causan dolor de garganta recurrente. A menudo, se inflaman y se pueden ver como unas pelotitas de golf a cada lado del cuello.

¿Qué son los adenoides o vegetaciones?

Los adenoides también están constituidos por tejido linfoide y no se pueden ver ya que están situados en la parte posterior de la nariz, muy cerca de las trompas de Eustaquio, que drenan las secreciones del oído medio a los conductos nasales. Los adenoides se inflaman en respuesta a las infecciones del tracto respiratorio y por problemas alérgicos.

¿Porqué se extirpan las amígdalas y los adenoides?

A. A causa de infección

  • Amigdalectomía. Cuando el paciente padece infecciones frecuentes en el cuello está indicada la amigdalectomía. Está indicada en aquellos niños que han tenido 5 o más episodios en un año o unos cuantos años con repetidas infecciones.
  • Adenoidectomía
    • I. Las infecciones sinusales repetidas o de larga duración, a pesar de aplicar los tratamientos médicos adecuados.
    • II. Las infecciones de oído recurrentes (con o sin secreción) complicadas con obstrucción o inflamación de los adenoides.

B. Obstrucción de las vías aéreas
Las obstrucciones pueden ser causadas por un crecimiento de las amígdalas y/o de los adenoides. Los síntomas de una obstrucción nasal incluyen:

  1. Ronquera fuerte e irregular durante el sueño
  2. Sueño interrumpido a causa de:
    a. Despertar frecuente por la noche, mientras ronca.
    b. Apnea (sin respiración)
    c. Exceso de fatiga, sueño ligero durante el día
    d. Irritabilidad
    e. Enuresis nocturna
  3. Respiración crónica por la boca, mala respiración. La respiración por la boca de forma prolongada puede causar cambios en la posición de la mandíbula, el paladar y la lengua que pueden provocar una mala oclusión de los dientes.

C. Problemas al comer o al deglutir

Pueden contribuir a un pobre incremento del peso.

D. Problemas con el lenguaje sin otras causas objetivas
El lenguaje puede sonar exageradamente sentimental, mutilado o apagado.

¿Qué debo hacer si mi hijo se ha de operar?

Una vez decidido que su hijo ha de ser sometido a una amigdalectomía y/o a una adenoidectomía, no se le ha de dar ninguna aspirina o medicamento que contenga ibuprofeno, durante 2 semanas antes de la cirugía. La aspirina es un antiagregante plaquetario, que reduce la capacidad del cuerpo para cerrar las heridas. Muchos de los productos que se venden en las farmacias sin prescripción contienen aspirina (ácido acetilsalicílico), por lo que es necesario fijarse cuidadosamente en las etiquetas. Si cree que su hijo necesita antes de la cirugía algún medicamento con los mismos efectos que los anteriores, se le puede dar acetominofen o paracetamol.

Información sobre el procedimiento quirúrgico

No se ha podido demostrar que la extirpación quirúrgica de las amígdalas y los adenoides puedan generar inmunodeficiencia o algún otro tipo de enfermedad. Después de la intervención ya no padecerá más de amigdalitis, mientras que otras infecciones virales como la faringitis pueden aparecer.

La amigdalectomía puede requerir, según los casos, una noche en la clínica. La adenoidectomía es por sí misma una intervención ambulatoria. El anestesista hablará con usted antes de la intervención. Le sugerimos que se anote las preguntas que desee hacerle. El monitorizará a su hijo durante todo el proceso quirúrgico.

Una amigdalectomía dura aproximadamente unos 20-30 minutos. Una adenoidectomía unos 10 - 20 minutos. Una vez esté dormido se le colocará una vía intravenosa para suministrarle sueros hidratantes durante unas 4 horas después de la intervención y una vez recuperado de los efectos de la anestesia. El cirujano hablará con usted después de terminada la intervención.

Una vez en casa, podrá comenzar a tomar una dieta normal en la que masticar es necesario. Entre comidas, y si su hijo es suficientemente mayor, puede masticar chicle.

¿Qué he de saber cuando mi hijo vuelva a casa?

Amigdalectomía

  • Dolor: Los niños que es quejen de dolor, sobre todo los primeros días después de la intervención, se les puede dar el analgésico que le recetará su médico, especialmente entre ½ i 1 hora antes de comer. Recuerde que no se le puede administrar aspirina o similares. La duración del dolor varía. Los más pequeños suelen curarse más rápidamente y suelen tener dolor unos cuantos días. Los adolescentes pueden encontrarse mal hasta los 10 días después de la intervención. Cuanto antes el niño empiece a comer y se reintegre a sus actividades habituales, más pronto le desaparecerá el dolor. Ocasionalmente, los niños pueden tener dolor de oreja. Esto es normal, a causa de la irritación del nervio que conecta las orejas y las amígdalas. En el fondo de la garganta podrá observar una zona blanca donde había las amígdalas. Esto es normal y forma parte del proceso de curación.
  • Sangrado: El sangrado ocurre en aproximadamente un 1% o menos de casos después de una amigdalectomía. Lo más frecuente es que pase dentro de los 5 a 10 días después de la intervención, si la costra se desprende. Se deberá ir de urgencia si su hijo tose o escupe sangre. No dude en decir que se trata de una urgencia. El riesgo de sangrado se reduce notablemente con unos hábitos normales de comer y masticar. Si su hijo está al cuidado de otra persona durante el postoperatorio, asegúrese que está al corriente de esta información y dónde ha de telefonear para pedir asistencia.
  • Temperatura: La temperatura de la comida ha de ser ligeramente fría.
  • Dieta: El niño ha de observar una dieta normal con alimentos que deban ser masticados. Deberá tomar una buena cantidad de líquidos. No se le debe restringir ningún tipo de alimento, deje que coma aquello que le guste.
  • Actividad: Ha de desarrollar las actividades normales tan pronto como sea posible, incluyendo el retorno a la escuela.

Adenoidectomía

Notará que su hijo ronca o tiene una congestión por pocos días después de la cirugía. Esto es a causa de la hinchazón del fondo de la nariz y debería remitir tan pronto como se comience a deshinchar. Su hijo puede respirar mal después de la operación, esto desaparecerá al cabo de unos días.

  • Sangrado: Es inusual después de una adenoidectomía (1 de cada 1000) y a menudo se produce inmediatamente después de la cirugía.
  • Dolor: Su médico le recetará un analgésico después de la adenoidectomía. Puede ser que tenga dolor de garganta durante la noche inmediatamente después de la cirugía.
  • Dieta: Ha de retornar a la dieta habitual inmediatamente después de la cirugía.
  • Actividad: Ha de volver a las actividades normales inmediatamente y puede ir a la escuela al día siguiente.