¿Me quedarán cicatrices tras una intervención de pecho?

Existen varios tipos de intervenciones de pecho y, dependiendo de lo que se desee corregir y de la técnica que su utilice, cambiará la cicatrización. En el aumento mamario, intervención más frecuente, las cicatrices son mínimas porque la cirugía consiste en colocar, únicamente, una prótesis en el interior del organismo. Las incisiones en el surco submamario, las incisiones periareolares, alrededor de la areola, o bien por vía axilar, permiten esconder las cicatrices para que no sean perceptibles después de la operación. La reducción mamaria, para aquellas mujeres con exceso de pecho, implica una elevación mamaria porque las mamas muy voluminosas también suelen estar caídas. En esta intervención, la cicatriz puede ser más visible. En todo tipo de intervenciones de cirugía estética se deben cumplir una serie de principios, como esconder al máximo las cicatrices que, en el caso de la mama, será mediante incisiones submamarias por debajo del pecho. Otro principio es el uso de suturas sofisticadas mediante técnicas específicas que permiten que las cicatrices sean de máxima calidad posible. Además, cuando se retiran los puntos, es recomendable que la paciente siga un tratamiento específico con parches de silicona y aceite de rosa mosqueta para disimular aun más la cicatriz. Por último, en las reconstrucciones mamarias después de un cáncer, habrá mayor o menor cicatrización según la complejidad de la reconstrucción. Cuando una mama es reconstruida después de un cáncer, habitualmente no solo se opera la mama que ha sido intervenida, sino que se debe operar, también, la mama contralateral sana para igualarlas al máximo. En este tipo de cirugía también se deberán aplicar los principios explicados anteriormente.