Alteraciones del Olfato


alteraciones del olfato y prueba de olfatometríaalteraciones del olfato y prueba de olfatometría

Prueba de olfatometría


El sentido del olfato se encuentra situado en la parte más alta de las fosas nasales, donde los receptores ocupan una superficie de 5 cm2, con unos 10 millones de células receptoras, recubiertas de un moco que permite la disolución de las partículas que transportan los olores. El ser humano es capaz de identificar entre 2000 y 4000 olores diferentes.

La pérdida del olfato, total o parcial, tiene una importante repercusión en la calidad de vida. Esta importancia sólo se aprecia cuando se pierde este sentido, porque conlleva la pérdida del gusto o de sus matices. Los receptores de la lengua sólo son capaces de distinguir salado, dulce, ácido, amargo y, el resto de la sensación gustatoria viene dado por el sentido del olfato.


¿Causas y tratamiento de las alteraciones del olfato?

La causa más frecuente de pérdida de olfato es la edad: 25% de la población mayor de 50 años tiene disminuida la función olfatoria y, aproximadamente, el 30% de la población mayor de 75 años tiene una pérdida completa de olfacción.

Otras causas pueden ser puramente nasales (rinitis, pólipos, procesos catarrales, sinusitis, tumoraciones nasales, radioterapia sobre la mucosa nasal…), otras extranasales (Diabetes, alteraciones renales, enfermedades congénitas, tabaco, cocaína, traumatismos craneales…) y, por último, intracraneales (Alzheimer, Parkinson, tumores intracraneales…).

En todos los casos se hace indispensable una consulta con el otorrinolaringólogo, que efectuará una exploración completa de los órganos implicados, con endoscopia, y pruebas complementarias (olfatometría, TAC, RM) para establecer la posible causa de la pérdida de olfato e instaurar el tratamiento más adecuado.