¿Puede haber complicaciones?

La rinoplastia es una cirugía delicada, pero generalmente no presenta complicaciones. Como en toda cirugía, sin embargo, ocasionalmente pueden haber infecciones, abultamiento excesivo, sangrado, retrasos en la cicatrización, reacciones alérgicas o reacciones a la anestesia. El riesgo se puede reducir al mínimo siguiendo fielmente las indicaciones del cirujano, tanto antes como después de la intervención.

Debido a la intervención se pueden formar cicatrices internas (sinequias) en las fosas nasales. Si bien pueden provocar ciertas molestias, son fáciles de solucionar y generalmente se pueden resolver a la misma consulta.