Anginas y dolor de garganta

¿Qué provoca las anginas?

Las anginas son un síntoma de un abanico de diversos trastornos médicos. Las infecciones causan la mayoría de las anginas, que suelen ser contagiosas. Las infecciones están provocadas por virus, como la gripe, el resfriado común, la mononucleosis, o por bacterias como el estreptococo, el micoplasma o el hemofilus. La diferencia más importante entre los virus y las bacterias es que la bacteria responde bien delante de los antibióticos, mientras que el virus no.

  • Virus: Muchas anginas van acompañadas de fiebre y resfriado. Cuando la nariz chorrea, y hay un malestar generalizado, probablemente la causa es un virus. Se contagian muy rápidamente entre la comunidad que se frecuenta, especialmente durante el invierno. El cuerpo reacciona y se cura solo de las infecciones por virus creando anticuerpos que destruyen el virus, un proceso que dura aproximadamente una semana.

Existe una infección viral especial, que dura mucho más de una semana en curarse. Es la mononucleosis. Este virus se aloja en el sistema linfático causando una inflamación masiva de las amígdalas, con aparición de pus. Este pus se traga con la comida o con la saliva creando serias dificultades al deglutir y puede afectar al hígado, provocando una ictericia. Deja una fatiga extrema y puede durar seis semanas o más.

La mononucleosis puede crear problemas severos en un adolescente o un adulto, y no es tan severa en un niño. Como que se transmite por medio de la saliva se le denomina la "enfermedad del beso", pero lo cierto es que se puede transmitir con mucha facilidad cuando se comparten servilletas y utensilios de comida.

  • Bacteria: Las infecciones en la faringe son causadas por el estreptococo. Esta infección puede causar daños en las válvulas del corazón (fiebre reumática) y en los riñones (nefritis). Las infecciones por estreptococo pueden también causar la fiebre escarlata, amigdalitis, neumonía, sinusitis, e infecciones en la oreja.

Para prevenir estas posibles complicaciones el tratamiento adecuado son los antibióticos. El estreptococo no siempre se detecta fácilmente por exploración, y el médico puede recomendar un cultivo.

La amigdalitis es una infección del tejido de las amígdalas que hay a cada lado de la parte posterior del cuello. En los primeros dos o tres años de vida de un niño, estos tejidos "captan" las infecciones y ayudan a crear su propio sistema inmunitario (anticuerpos). Unas amígdalas sanas no retienen la infección. Frecuentes infecciones de las amígdalas pueden sugerir que la infección no ha sido curada del todo entre cada episodio. Un estudio médico ha demostrado que los niños que padecen frecuentes episodios de amigdalitis (3 o 4 veces cada año y durante diversos años) han mejorado su salud después de extirparles quirúrgicamente las amígdalas.

Las lesiones en las amígdalas no siempre son benignas, y pueden encubrir otras patologías como linfoma, leucemia, cáncer de amígdalas, etc., que hay que diagnosticar con precisión.

Las infecciones en la nariz y en los senos pueden causar también dolor de garganta ya que las mucosidades de la nariz pasan al cuello y llevan con ellas la infección.

La infección más peligrosa es la epiglotitis, causada por una bacteria que infecta una parte de la laringe y causa una inflamación que cierra la vía respiratoria. Esta infección requiere un tratamiento de urgencia. Hay que sospechar que puede haber epiglotitis cuando la deglución es extremadamente dolorosa, cuando el habla es apagada y cuando la respiración se vuelve dificultosa.

  • Alergia: La fiebre del heno y las alergias pueden producir una irritación en el cuello durante un ataque de alergia similar a la obstrucción, picor en la nariz, estornudos y goteo nasal. Los mismos pólenes y substancias que irritan la nariz cuando son inhalados pueden también irritar la garganta. La caspa de los gatos y de los perros y el polvo de la casa pueden causar problemas en el cuello a las personas que son alérgicas a estos agentes.
  • Irritación: Durante los meses de invierno, el aire caliente y seco de las calefacciones puede crear dolor de garganta recurrente, especialmente por la mañana. Normalmente, este trastorno pasa humidificando el aire de la habitación.

Una causa ocasional del dolor de garganta matinal es el reflujo, o la regurgitación del ácido del estómago que llega a la garganta y es extremadamente irritante. Se puede evitar elevando el colchón de la cama con un cojín de manera que la cabeza esté más elevada, unos 15 cm. por encima de los pies. También se ha de evitar comer y beber una hora o dos antes de irse a dormir. Los antiácidos pueden ayudar a evitar el reflujo. Si con todo esto no mejora, visite a su médico.

La polución industrial y los contaminantes químicos en el aire pueden irritar la nariz y el cuello, por más irritante que todo esto, es el humo del tabaco. Muchas personas no lo pueden tolerar porque son alérgicas o hipersensibles a estas substancias. Otros irritantes son los ambientes cargados de humo de tabaco, las bebidas alcohólicas y los alimentos especiados.

Una persona que fuerza su voz, en actos deportivos, por ejemplo, no sólo le produce dolor de cuello por forzar en exceso su musculatura, sino también por el tratamiento brutal al que se someten las cuerdas vocales. Los comunicadores expertos, y los cantantes aprenden a producir voces potentes con respiraciones profundas y usando el tórax y los músculos abdominales. Este aprendizaje se imparte en los de la Clínica Rinológica.

  • Tumores: Los tumores del cuello, la lengua y la laringe se asocian, pero no siempre, con el uso del tabaco y el alcohol durante mucho tiempo. El dolor de cuello y la dificultad al deglutir, a veces con dolor que irradia hacia la oreja, pueden ser síntomas de un posible tumor. Otros síntomas importantes son las alteraciones de la voz, una deformidad en el cuello, pérdidas de peso inexplicables o restos de sangre en la saliva o en el esputo.

¿Cómo puedo automedicarme para el dolor de cuello?

Un dolor de cuello suave asociado con un resfriado o síntomas gripales, se puede hacer más soportable con los remedos siguientes:

  • Incrementar la ingesta de líquidos (Té o leche caliente con miel es un remedio casero que puede ir muy bien)
  • Use un humidificador en su habitación
  • Haga gargarismos con agua salada caliente, o una infusión de tomillo con miel y limón, varias veces al día.
  • Si persisten las molestias, visite a su médico.
  • Considerar la medicina homeopática como terapia complementaria para determinadas patologías.

¿Cuándo debería visitar al médico?

Si un dolor de cuello severo persiste más allá de 5 o 7 días, la duración de un resfriado, y no está asociado a un proceso alérgico o irritación evitable, debería visitar al médico. Los síntomas siguientes deberían alertarle para visitar a su médico:

  • Dolor de cuello severo y prolongado
  • Dificultad para respirar
  • Dificultad para deglutir
  • Dificultad para abrir la boca
  • Dolor articular
  • Dolor de oreja
  • Erupción cutánea
  • Fiebre
  • Sangre en la saliva o en el esputo
  • Dolor de cuello recurrente y frecuente
  • Deformidad en el cuello
  • Cambios en la voz en las últimas dos semanas

¿Cuándo debería tomar antibióticos?

Los antibióticos son unos medicamentos que matan o deterioran las bacterias. La penicilina, la eritromicina y otros se prescriben cuando el médico sospecha que hay una infección por estreptococos u otras infecciones bacterianas que responderán a la acción del antibiótico. No obstante, hay un gran nombre de infecciones bacterianas que no responden a la penicilina, y requieren otros tipos de antibióticos. Los antibióticos no curan las infecciones virales, pero, a veces, se dan para evitar sobreinfecciones bacterianas. Cuando una infección combinada se presenta, el uso de antibióticos es necesario.

¿Qué pasa si mi cultivo es negativo?

Los cultivos de estreptococos sólo sirven para detectar si hay infección por estreptococo. Muchas otras infecciones, bacterianas y virales, pueden presentar cultivos negativos y algunas veces la infección es por estreptococos. Si el cultivo es negativo, su médico tomará la decisión sobre el tratamiento según la severidad de sus síntomas y la apariencia de su cuello basada en la exploración. Nunca debe interrumpirse una medicación, salvo instrucciones de su médico en este sentido.

¿Deben medicarse los demás miembros de mi familia?

Si el cultivo de estreptococo es positivo, muchos expertos recomiendan que se traten los demás miembros de la familia, ya que las infecciones por estreptococo son muy contagiosas. Otros recomiendan tratar sólo aquellos miembros de la familia con problemas de cuello y hacer cultivos a los demás. Expóngale a su médico en qué situación están los otros miembros de su familia en el caso que usted esté infectado. Lo mejor es practicar buenos hábitos sanitarios: lavarse las manos, evitar el contacto físico, no compartir servilletas, toallas ni utensilios de la persona infectada.