Linfedema

La linfedema se origina cuando los vasos linfáticos no drenan bien su contenido rico en proteínas plasmáticas procedentes del espacio intersticial al que llegaron por los capilares sanguíneos. Acto seguido se produce un edema que favorece la proliferación fibroblástica, la cual, dificulta la circulación linfática, cerrando un circulo vicioso que puede conducir a la elefantiasis más monstruosa.

Los edemas linfáticos son blancos, duros y elásticos, de modo que la huella digital no queda. La piel aparece distendida y con implantaciones pilosas formando mayor relieve.

Se distinguen dos grandes grupos: el linfedema congénito y los secundarios.

Alguno de los diferentes tipos incluidos en el primer grupo, afectan en preferencia a mujeres jovenes, sin antecedentes ni causas que lo expliquen. Los primeros síntomas són hinchazón en el pie o tobillo de una extremidad que aumenta con el cansancio, el calor y los dias premenstruales; el reposo lo disminuye. Con los años deja de progresar, pero para entonces ya ha motivado aspereza cutánea, uñas amarillas, pesadez del miembro y a veces elefantiasis.

Al segundo grupo antes mencionado corresponden más del 50% de los casos detectados.

La elefantiasis, comprendida en este grupo, es la consecuencia de un linfedema intenso crónico y progresivo o inflamatorio. Otra enfermedad que afecta sobre todo a la mujer, aunque mucho más rara, es el lipoedema, un acúmulo de grasa simétrico en las dos piernas. Parece que es de índole familiar y debe considerarse más como un defecto estético que como una verdadera enfermedad