Injertos de grasa autóloga

Injertos-de-grasa-autóloga_1Esta técnica consiste en la infiltración de injertos de grasa autóloga en el tejido subcutáneo de las mamas. Mediante la infiltración de injertos de grasa autóloga se puede remodelar la mama y aumentar una talla o talla y media. Se transfieren estos injertos de una zona no deseada del cuerpo de la propia paciente (zonas en las cuales habitualmente hay depósitos de grasa: abdomen, flancos, muslos o caderas) a las mamas. La ventaja de esta técnica es que se prescinde de prótesis y los injertos de grasa son aceptados por el organismo.

¿Cómo se realiza la técnica?

La Dra. Ana Torres fue la especialista que introdujo en España la liposucción a baja presión para extraer los injertos de tejido graso mediante la tecnología Body-Jet Lipotransfer. Tras la extracción, en la misma intervención, y después de un proceso de lavado y filtrado de los injertos, se procede a la infiltración de estos en el tejido subcutáneo de la mama y dentro del músculo pectoral, dejando libre la glándula mamaria. Para poder realizar esta técnica es imprescindible que la paciente tenga un mínimo de grasa corporal.

¿Cuándo se pueden apreciar los resultados?

Los resultados definitivos se pueden observar entre el primer y tercer mes tras la intervención, cuando el edema ha remitido poco a poco y la mama tiene su tamaño definitivo.

Esta técnica permite que no queden cicatrices visibles en el pecho y que las realizadas para la liposucción (0,5 cm) sean imperceptibles porque se localizan en pliegues o zonas cubiertas por la ropa interior.

Cuidados postoperatorios

Tras la intervención el pecho prácticamente no presenta dolor, aunque pueden presentarse molestias los primeros días en las zonas en las cuales se ha extraído la grasa (el especialista pautará la medicación necesaria para que disminuya).

Para tener una buena recuperación y unos resultados excelentes, es muy importante llevar una faja para readaptar la zona tratada durante unas 3-4 semanas, realizar una cura diaria de las heridas y aplicar calor en las mamas los primeros días, así como el uso de un sujetador de algodón sin aros durante dos semanas.