Luxaciones

Las luxaciones son lesiones ocasionadas por un mecanismo de alta energía que da lugar a la separación entre dos huesos de una articulación.

En una situación de inestabilidad en el hombro se pierde el contacto entre dos de las cavidades articulares, el espacio subacromial y la articulación gleno-humeral. Cuando esta separación no es muy duradera hablamos de una subluxación, pero cuando es duradera en el tiempo se trata de una luxación.

Según las partes de la articulación que se separan, podemos hablar de distintos tipos de luxaciones:

  • Inestabilidad glenohumeral (conocida como luxación del hombro): la cabeza del húmero es proyectada hacia delante y salta por encima de la glenoides anterior. Es el tipo de luxación más frecuente y casi siempre se produce por un impacto en el brazo que se transmite al hombro provocando su dislocación.
  • Luxación acromioclavicular: a causa de un traumatismo en el hombro se produce una separación entre la clavícula y el acromion.
  • Luxación de clavícula: tras un traumatismo provocado por una caída sobre el hombro, se produce una lesionen el ligamento de la clavícula con luxación y ascenso de la misma.

La mayor parte de luxaciones se producen en personas que practican deportes de contacto o bien que realizan un movimiento de la articulación continúo e intenso. Dependiendo del grado de luxación, el paciente puede referir solo dolor y disconfort en su hombro, en estos casos se puede optar por un tratamiento conservador que, tras una intensa rehabilitación, puede dar excelentes resultados.

Una vez se ha producido una luxación objetiva, existen más posibilidades de que vuelva a ocurrir (luxación recidivante), en cuyo caso será necesario un tratamiento quirúrgico. Habitualmente esta cirugía se realiza por artroscopia, pero en casos de reincidencia tras el análisis individualizado es posible que deba realizarse nueva cirugía artroscópica o cirugía abierta.