Protección solar

Protegerse adecuadamente del sol es una medida básica para prevenir el cáncer de piel (puede consultar el apartado dedicado al libro "Cuando calienta el sol").

Aprender a tomar el sol

  • Evite la exposición solar hasta el punto de provocarle enrojecimiento (quemadura).
  • El tiempo límite dependerá de su tipo de piel, de la estación del año, la situación geográfica y la hora del día.
  • Las horas de máxima radiación coinciden con el mediodía con lo que debería evitarse su exposición entre las 12 de la mañana y las 4 de la tarde.
  • Recuerde que las nubes únicamente impiden el paso de una pequeña proporción de rayos ultravioleta.
  • La nieve, el agua y el hielo reflejan los rayos y aumentan su agresión sobre la piel.
  • Los niños hasta los tres años no tienen suficiente maduración de su sistema de defensa en la piel para la radiación solar por lo que deberemos extremar las precauciones si queremos prevenir el cáncer en la edad adulta.
  • Utilizar filtros solares. Son cremas que aplicadas sobre la piel actúan como una barrera para los rayos solares, ya sea "filtrando" las radiaciones mediante sustancias químicas con poder de absorción (filtros químicos), o bien formando "pantalla" mediante sustancias minerales que reflejan los rayos como pequeños espejos (filtros físicos).

Hay que aplicarlos una media hora antes de la exposición solar y repetir su aplicación cada 2 horas aproximadamente. La protección se expresa en un número, conocido como factor de protección. A partir del factor 15 se consigue un grado correcto de protección. La utilización de los filtros no exime de un sentido común en la exposición al sol. Los filtros no bloquean la radiación por lo que no se tendrían que utilizar como"excusa" para estar más tiempo bajo los rayos solares.