¿Cómo se trata la fisura anal idiopática?

Medidas generales

La primera medida que hay que tomar es evitar el estreñimiento mediante una dieta rica en fibra (frutas, verduras y cereales) y la administración de laxantes (ej.: fibras como el Plantago ovata). Se recomienda la realización de baños de asiento con agua tibia o caliente durante 10-15 minutos después de cada deposición para relajar la excesiva contracción del esfínter anal interno. Se debe procurar una higiene adecuada, así como evitar la ropa interior ajustada y el uso de papel higiénico (utilizar toallitas para hemorroides o lavado con agua y posterior secado de la zona para evitar la maceración).

La aplicación de pomadas anestésicas o con corticoides unos minutos antes de la defecación disminuirá el dolor y el escozor (no deben utilizarse más de una semana para evitar la irritación anal que induciría picor anal y lesiones por rascado secundarias, cerrando un círculo vicioso). Se pueden asociar analgésicos orales habituales para controlar el dolor (paracetamol o metamizol).

Tratamiento específico

El tratamiento específico va dirigido a vencer la excesiva contractura refleja del esfínter anal interno secundaria al dolor de la fisura. Se administran pomadas que disminuyen la presión del canal anal relajando el esfínter anal interno, permitiendo la cicatrización de la fisura. Estas pomadas deben ponerse con guantes para evitar que se absorban en el dedo. El efecto secundario más frecuente es el dolor de cabeza, obligando en ocasiones a suspender el tratamiento. Si no se tolera la pomada, no es eficaz o está contraindicado su uso, se puede evaluar el tratamiento con toxina botulínica o la cirugía.

La inyección en la consulta de toxina botulínica produce una relajación temporal del esfínter anal interno, curando la fisura en un elevado porcentaje de pacientes. Sin embargo, presenta un alto índice de recurrencias lo que obliga a practicar inyecciones repetidas.

La esfinterotomía lateral interna es la técnica quirúrgica más utilizada en el tratamiento de la fisura crónica idiopática. Consiste en la sección de la parte más baja del esfínter anal interno, de manera que se produce una disminución de la fuerza de cierre del ano en aproximadamente un centímetro de su longitud. Representa el tratamiento más eficaz para la curación de la fisura anal crónica pero, como en algunos pacientes produce incontinencia anal, se recomienda agotar al máximo el tratamiento médico.