Lipoescultura

¿Qué es?

La lipoescultura es el procedimiento quirúrgico más eficaz que permite una remodelación corporal mediante la extracción de los cúmulos de grasa subcutánea. Estos son frecuentemente hereditarios y son imposibles de eliminar solamente con ejercicios o dieta. Actualmente pueden ser extraídas de forma definitiva por la cirugía de lipoaspiración.

La principal ventaja de esta nueva técnica es que se consigue una remodelación corporal más precisa y mayor que la alcanzada con la clásica liposucción profunda.

El problema de la liposucción tradicional es que deja un colgajo cutáneo-adiposo demasiado grueso y pesado. Sin embargo, con la lipoescultura extirpamos también la grasa superficial dejando un colgajo mas fino y ligero que se retrae, creando así nuevas curvas y volúmenes enfatizando al máximo la propiedad de retracción de la piel.

La lipoescultura permite quitar grasa de manera precisa donde queremos, logrando un nuevo perfil corporal con brillante resultados estéticos. La lipoescultura se emplea para la reducción de la adiposidad en glúteos con escasa forma y medida, en piernas con poca definición de contorno, en caderas con cúmulos excesivos de grasa, en abdomen y en la región de la papada.

Lipoescultura-antes Lipoescultura-después
Imágenes cedidas por SECPRE

Preoperatorio

Durante la primera consulta el cirujano plástico evaluará su estado general, los depósitos de grasa existentes y el tono y firmeza de la piel. Se le explicarán los métodos alternativos para mejorar el contorno corporal, como la abdominoplastia, y se discutirán las opciones o la combinación de procedimientos que sean mejor para usted. Se le darán instrucciones acerca de cómo prepararse para la cirugía, incluyendo normas sobre toma de alimentos y líquidos, tabaco o toma o supresión de medicamentos, vitaminas y suplementos de hierro. Si padece un resfriado o una infección de cualquier tipo, sobre todo si es de piel, la cirugía puede posponerse. Asegúrese, además, de que algún familiar o acompañante pueda llevarle a casa cuando se le dé el alta y que, en caso necesario, puedan ayudarle un par de días.

Cirugía

La técnica, que siempre se realiza en un quirófano, consiste esencialmente en la aspiración de la grasa mediante la introducción de una cánula conectada a una máquina de vacío o a una jeringa especial, según el caso, y realizando numerosos túneles en el área previamente marcada.

La duración de una lipoescultura suele oscilar entre 1 y 2 horas, el tiempo es variable (desde 30 minutos a varias horas) dependiendo del área y la cantidad. Inicialmente, se realiza una pequeña incisión, suficiente como para introducir la cánula. El cirujano mueve la cánula entre los depósitos grasos situados bajo la piel, rompiendo la grasa y succionándola.

Esta nueva técnica introduce una variante que afecta al nivel de aspiración de la grasa, al calibre y a la formas de las cánulas.

Se introducen, a través de una pequeña incisión de 3-4 mm, las cánulas muy finas que conectadas a un aspirador extraen el exceso de grasa a nivel superficial. Se realiza este acto teniendo en cuenta algunas zonas del cuerpo que son claves para que se consiga una remodelación armónica de las curvas.

La intervención se realiza bajo anestesia general, local, o epidural dependiendo de la extensión de la zona a tratar o de la cantidad de grasa a aspirar.

Postoperatorio

Después de la operación los tejidos quedan edematizados, tardando 3-4 semanas en reducir su volumen por lo que los resultados pueden considerarse definitivos hasta transcurridos 3 meses de la intervención. Se colocará una faja, medias o vendaje elástico sobre la zona tratada para controlar la hinchazón y el sangrado, y para ayudar a la piel a adaptarse al nuevo contorno. Suele ser necesario llevarlo durante 2 o 3 semanas, y luego sólo durante el día durante unas semanas más, dependiendo de las instrucciones de su cirujano plástico. También pueden administrarse antibióticos para prevenir la infección.

La curación es un proceso gradual. Su cirujano plástico le indicará que comience a caminar tan pronto como le sea posible (para prevenir la formación de trombos venosos en las piernas), pero no realice actividades intensas durante 2 a 4 semanas. Los puntos serán retirados entre los 5 y 10 días, y podrá volver a trabajar en 2 o 3 días, o como mucho, tras 2 semanas desde la intervención, dependiendo de la extensión de la liposucción y de las recomendaciones de su cirujano. La inflamación y los hematomas desaparecerán en el primer o segundo mes tras la liposucción; sin embargo, una mínima inflamación puede mantenerse durante 6 o más meses.

Información complementaria

La liposucción es una técnica segura, siempre y cuando se seleccione bien al paciente, el quirófano esté bien equipado y sea realizada por un cirujano plástico cualificado. Sin embargo, en algunos casos se pueden producir complicaciones, sobre todo cuando se extraen cantidades altas de grasa en una sola vez. Otra complicación infrecuente, aunque posible, es la acumulación de líquido (que debe ser drenado) y la lesión de la piel. Aunque las complicaciones serias son muy raras, se podría presentar infección y pérdida excesiva de líquidos que requerirían del tratamiento adecuado.

Conclusiones

Las ventajas de esta técnica son la presencia de cicatrices mínimas, dolor escaso, no se precisan inmovilizaciones prolongadas, posibilidad de tratar en una sola intervención varias zonas del cuerpo, reanudación de las actividades habituales en 4-5 días y posibilidad de asociarse a otras intervenciones como la reducción del volumen mamario o la dermolipectomía. De las técnicas hoy utilizadas para la reducción de la adiposidad localizada, la lipoescultura superficial permite conseguir mejor disminución volumétrica y más detallada escultura del contorno corporal, pudiendo no sólo reducir volumen graso, sino también mejorar las curvas y los volúmenes para crear una nueva silueta. Hoy podemos proponer, sin dudas, un acto quirúrgico eficaz, seguro y con brillantes resultados estéticos.